El pasado jueves, recibimos una visita especial. Nos trasladamos a la sala de psicomotricidad y algo había cambiado. No había colchonetas ni ninguna de las sorpresas que solemos encontrarnos,
Nos asomamos y nuestra sala se había transformado en una peluquería, con su zona de peinado, de pintauñas, su sala de espera y un rinconcito para jugar a ponernos los rulos.
A cargo de todo esto estaba Naiara la mamá de Lola.
Cada uno eligió ir al rincón que más le apetecía, mientras unos se pintaban las uñas, otros esperaban su turno en la sala de espera leyendo una revista, el resto jugaba con los rulos y el que quiso pasó por las manos de esta mamá peluquera y se dejó hacer un precioso peinado, e incluso alguna chica salió con brillantitos en la cara y los labios maquillados.
A última hora apareció en la peluquería el papá de Lola, que nos entretuvo cantando y bailando hasta que todos estuvimos bien guapos.
Fue una mañana diferente y divertidisima y además de ser guapos por dentro, nos dejarón guapos por fuera y es que estos pequeñajos son muy presumidos.
Os dejamos una pequeña muestra de lo que ocurrió en la Peluquería Nueva Montaña.
Desde aquí queremos dar las gracias a Naiara y a Vitin por su participación en los
talleres de padres.
Fue una mañana muy divertida